El responsive design no es una nueva tecnología ni un software de diseño web. Este termino se usa para referirnos al diseño web adaptativo que se amolda a los diferentes tamaños de los dispositivos donde podemos visualizar una web.
Antiguamente diseñar una web para móviles, ordenadores de escritorio o tabletas y que se adaptara la maquetación a su resolución resultaba complicado. Actualmente las nuevas reglas de CSS3 vienen a cubrir esta laguna con sus reglas mediaquery, mediante las cuales, un mismo elemento se representará de distinta manera según la resolución de la pantalla.
Hace ya unos años que se vienen usando estos nuevos servicios para una mejor usabilidad en la web de cara al usuario que utilice diferentes dispositivos. Personalmente lo veía como algo lejano y que no merecía la pena implicarse debido a su complejidad. Actualmente la situación ha cambiado y presentar al usuario una web adaptada al medio es sinónimo de vanguardismo.
Existen muchos frameworks que ayudan bastante para implementar en diseño adaptativo en la web, entre ellos los más conocido son Bootstrap o Foundation. Bootstrap además de ser gratuito, está desarrollado por los creadores de Twitter, (incorpora otras funciones para tipografía en la web y jQuery). Gracias a unas simples etiquetas tendremos nuestra web preparada para cualquier dispositivo.
Esta opción es muy útil por su rapidez en la implantación pero tiene un inconveniente que hay que tener en cuenta para los desarrolladores web y es su limitación para poder cambiar algo que no nos guste o que nos gustaría que funcionará de otra forma. La mejor opción es desarrollar el código de maquetación por nosotros mismo ya que de esta manera tendremos más opciones para «jugar» con nuestra web. Además con las nuevas reglas de CSS3 y HTML5 que publican constantemente siempre tendremos el riesgo de que nuestros framework se quede obsoleto en el caso de que sus desarrolladores no lo actualicen.
Categoría/s: Diseño y desarrollo web
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